Los orígenes del convento de Valdeflores, en Junquera, datan del siglo XIV. Según la leyenda la imagen de la Virgen apareció bajo un espino florido en pleno invierno.
Sobre la portada de la iglesia, ojival con adornos románicos, hay una escultura de Santo Domingo, rescatada del antiguo convento derruido de los dominicos de Viveiro.

La imagen de la Virgen de Valdeflores es de alabastro policromado y la representa de pié con el Niño en su brazo izquierdo.
Las monjas dominicas del convento confeccionan una gran variedad de dulces a cuál mejor. Tienen una página Web: www.valdeflores.es.















